Por qué Wylis se convierte en Hodor. Explicación neuropsicológica.


Últimamente se habla mucho de un suceso relacionado con un personaje de ficción. Se trata de Hodor, de la serie Juego de Tronos. En el final del episodio número cinco de la sexta temporada, se explica por qué el sirviente de los Stark solamente dice la palabra Hodor. Si aún no has visto este capítulo, mejor deja de leer ahora para que no te estropeemos la sorpresa.

En este capítulo, (ATENCIÓN SPOILER) Bran está en la cueva del árbol, con el Cuervo de Tres Ojos, teniendo una visión del pasado de Invernalia en la que está Hodor de niño, que en realidad se llama Wylis (Walder en los libros). En ese momento, el del presente, llega el ejército de los caminantes blancos, por lo que Meera le pide a Bran que controle al Hodor del presente para que le ayude a escapar de allí. Sin volver al presente, Bran controla a Hodor. Cuando salen del árbol, le pide que sujete la puerta (en inglés «hold the door«) para evitar que salgan los caminantes blancos. En el intento por proteger la salida, Hodor muere.

Hodor-Wylis

Wylis (el Hodor del pasado), tiene en ese momento una conexión con Bran (al que parece que ve en el pasado), pone los ojos en blanco, se cae al suelo y entre convulsiones repite una y otra vez «hold the door«, hasta que termina por contraer la frase en la palabra «HODOR«.

bran-hodor

Respecto a lo sucedido en este capítulo los fans tienen diferentes teorías. La mayoría parece coincidir en que el Hodor del pasado vivió una experiencia traumática al ver (o quizá también sentir) cómo moría de adulto, lo que lo llevó a ese estado en el que cada vez que abre la boca es para decir «hodor«.

Algunas personas nos han hecho la siguiente pregunta:

«¿Sería posible, en la vida real, que a alguien que vive un suceso traumático le sucediese lo mismo que a Hodor?».

La respuesta requiere un análisis detallado de diferentes aspectos.

Sabemos, por las imágenes del pasado, que Wylis habla hasta el punto de entender y construir frases con sentido. Además, viendo entrenar con la espada a otras personas, hace valoraciones de cómo deberían actuar, es decir, es una persona con capacidad de análisis.

En el caso de Hodor adulto, podemos decir que el lenguaje se reduce a una estereotipia verbal, que es el grado máximo de reducción lingüística. La estereotipia consiste en reproducir un único enunciado (la palabra «hodor«, que el personaje produce repetidamente cada vez que intenta articular lenguaje), mientras que el resto del léxico ha desaparecido. El personaje emplea esa expresión con total espontaneidad, hasta el punto en que toda pregunta, respuesta o petición es contestada o planteada con la palabra «hodor«. Además, en ocasiones, le da entonación a esa expresión, por lo que la estereotipia adquiere un valor comunicativo.

Parece que Hodor tiene dañada el área del lenguaje, pero no en su totalidad. Es capaz de articular palabras aunque se reduzcan a la estereotipia «hodor«, es capaz de comprender oraciones aunque solo responda a ellas con la palabra «hodor«, es capaz de comprender órdenes e incluso anticipa las necesidades de los demás, por lo que podemos afirmar que es consciente de su entorno.

Por ello, podría tratarse de una afasia global, ya que «el lenguaje espontaneo es inexistente o reducido a estereotipias o fragmentos silábicos y su comprensión es limitada a órdenes simples».

Las causas más frecuentes de los trastornos afásicos, por orden de prevalencia, son: los accidentes cerebrovasculares (ACV), los traumatismos craneales, los tumores cerebrales y la malnutrición alimenticia severa durante el embarazo (algo que descartamos en el caso de Hodor ya que, si este fuera el caso, entonces Wylis tendría problemas del lenguaje y no es así).

ojos blancos

Dado que Wylis pone primero los ojos en blanco y después se cae, podemos deducir que lo que le haya ocurrido, es inmediatamente anterior a caerse al suelo, por lo que podemos descartar un traumatismo craneal, así como el tumor cerebral, ya que sería demasiada coincidencia que justamente un tumor manifestara sus síntomas en ese preciso momento. Por lo tanto, adquiere más fuerza la posibilidad de que haya sufrido un ACV y, por eso, se ha caído al suelo.

Un accidente cerebrovascular ocurre cuando un vaso sanguíneo que lleva sangre al cerebro se rompe o es taponado por un coágulo u otra partícula y, debido a ello, parte del cerebro no consigue el flujo de sangre que necesita. Como consecuencia, las células nerviosas de la zona afectada no reciben oxígeno, por lo que no pueden funcionar y mueren transcurridos unos minutos. En función del área afectada, pueden producirse muchos síntomas diferentes. Si la lesión es en el lado izquierdo del cerebro, se producirían, entre otros síntomas, problemas del habla y del lenguaje, lo que refuerza nuestra teoría del ACV.

Pero esto nos lleva a plantearnos otra pregunta:

«¿Qué posibilidad existe de que alguien sufra un accidente cerebrovascular al vivir un acontecimiento vital estresante?«.

Un suceso o acontecimiento vital estresante se trata de un hecho relevante para la vida de la persona y que amenaza, desafía, excede o daña las capacidades psicológicas o biológicas del individuo. Podrían incluirse acontecimientos traumáticos agudos como los desastres, el abuso sexual o físico, la violencia, el maltrato, el estrés crónico, dificultades económicas, enfermedades crónicas,… Por lo que verse morir de adulto, o incluso sentir en carne propia los arañazos de los caminantes blancos, podría catalogarse como tal y podríamos afirmar que Wylis vivió un acontecimiento vital estresante relevante para su vida.

Una consecuencia de vivir un suceso traumático es que el cuerpo se prepara para proteger su vida («atacar o huir»), lo que requiere de un mayor aporte de oxígeno a todos los músculos para que estén preparados para defenderse y protegerse. Este mayor aporte de oxígeno requiere también una mayor frecuencia cardíaca y mayor presión arterial, entre otras cosas.

Pero, qué condiciones deben darse para que se produzca un ACV al vivir una situación estresante de carácter vital?

Son muchos los factores que pueden aumentar las posibilidades de padecer un ACV. Aunque entre ellos no se encuentra directamente el vivir un suceso traumático o estresante, a mayor número de factores que posea la persona, mayor probabilidad de padecer un ACV. Entre los factores que incrementan el riesgo de padecer un accidente cerebrovascular se encuentran:

  • Edad avanzada.
  • Sexo: Aunque se produce por igual en los dos sexos, causa más muertes en mujeres que en hombres.
  • Antecedentes familiares.
  • Haber sufrido uno recientemente y/o sufrir ataques isquémicos transitorios.
  • Hipertensión.
  • Fumar, beber alcohol y tomar drogas.
  • Diabetes.
  • Sufrir enfermedad de la arteria carótida y/o presentar enfermedad cardíaca.
  • Contador de glóbulos rojos alto.
  • La estación del año y el clima: ocurren con más frecuencia con temperaturas extremadamente frías o calurosas.

Para que aumente el riesgo de infarto cerebral, hasta el punto de padecer uno, Wylis debería padecer alguno de los factores citados.

Descartamos la edad y el sexo, ya que es joven y sabemos que se producen por igual en ambos sexos.

En cuanto al clima, sabemos que en ese mundo las estaciones duran mucho más de lo que estamos acostumbrados, pero sabemos una cosa: el invierno se acerca («winter is coming»). Dado que se acerca, estarán en otoño y dadas las vestimentas algo de fresco hará, pero aún no hay nieve en Invernalia, así que podemos concluir que wylis no está sometido en ese momento a temperaturas ni extremadamente frías ni calurosas.

No sabemos si padece alguna enfermedad, ni si consume algún tipo de droga que pudiera haber en ese mundo.

Desconocemos antecedentes familiares de ACV, ni si él ha padecido alguno con anterioridad, pero existen posibilidades de que haya alguna lesión o problema arterial, problema circulatorio o de coagulación, que facilite la formación de coágulos o la rotura de los vasos. Con el estrés de enfrentarse al suceso traumático, algún coágulo en alguna parte del cuerpo se desplazaría al cerebro y/o rompería un vaso sanguíneo, provocando un ACV.

Valorados los factores anteriores, nos queda la hipertensión, cuyas causas pueden ser:

  • Enfermedad renal, colesterol o diabetes: Desconocemos si padece alguna.
  • Exceso de función de algunas glándulas endocrinas que aumentan la producción de mineralcorticoides (hiperaldosteronismo) o catecolaminas (feocromocitoma): Parece que no es el caso, dado que no cumple los síntomas para dichas enfermedades.
  • Herencia: Desconocemos si sus padres la padecen.
  • Sexo: Los hombres tienen mayor predisposición que las mujeres.
  • Edad: Poca probabilidad ya que es menor de 65 años.
  • Sobrepeso: La frecuencia de hipertensión arterial entre las personas con obesidad, a cualquier edad que se considere, es entre dos y tres veces superior a la de las personas de la misma edad que estén en su peso ideal. Por lo que podría ser el caso.
  • Estilo de vida, como el consumo de alcohol o tabaco, dieta rica en grasa, sedentarismo o niveles elevados de estrés: Siendo un mozo de cuadras, sirviente de los Stark, no debiera llevar una vida demasiado sedentaria y posiblemente pudiera estar sometido a estrés. El resto de factores los desconocemos.

Por lo tanto podría ser que Wylis tuviera algún riesgo de padecer hipertensión, asociado a algún problema de la circulación y por ello, tras vivir un acontecimiento estresante de carácter vital, como es el hecho de verse morir de adulto, sufra un infarto cerebral que le dañe el lado izquierdo del cerebro, concretamente la zona que controla el lenguaje (área de Broca y/o área de Wernicke) y esto le provoque una afasia global en la que su lenguaje se reduzca a una estereotipia como es la palabra «hodor«.

Debemos considerar también, que si Wylis sufrió un accidente cerebrovascular, teniendo en cuenta la falta de medios médicos del mundo en el que vive y la falta de tratamiento especializado, tuvo mucha suerte de que su única secuela fuera la del habla y no le hubiese quedado ninguna parálisis.

En conclusión, ante la pregunta de si sería posible, en la realidad, que a alguien que vive un suceso traumático, le pueda llegar a suceder lo mismo que a Hodor, la respuesta es:

Sí. Podría ocurrirle lo mismo a una persona en nuestro mundo si se enfrenta a una situación o acontecimiento vital estresante y posee alguno de los factores que aumenten el riesgo de padecer un accidente cerebrovascular. En función de la zona afectada y el tiempo que tarde en ser atendido tras el ACV, las secuelas pueden ser muy variadas.

Este artículo no pretende ser un estudio científico, ya que estamos basándonos en aspectos, comportamientos y síntomas de un personaje de ficción que vive en un mundo imaginario en el que tienen cabida la magia y todo tipo de seres sobrenaturales.
En la vida real, cuando alguien llega a consulta para recibir un tratamiento para la afasia, lo habitual es que sepa (al menos la familia que, en la mayoría de los casos, suele ser quien nos facilita la información) a causa de qué ha adquirido ese trastorno del lenguaje. Además, es imprescindible realizar pruebas de imagen como TC y RM entre otras, para conocer el alcance de la lesión y el enfoque de los diferentes tratamientos rehabilitadores.

En nuestro mundo existen diferentes programas terapéuticos (de los que Hodor se podría beneficiar) para mejorar la afasia y otras posibles secuelas de un accidente cardiovascular, pero eso ya lo veremos en otro artículo.

Os invitamos a compartir vuestras opiniones en la sección de comentarios.

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Publicado en blog
One comment on “Por qué Wylis se convierte en Hodor. Explicación neuropsicológica.
  1. Carlos dice:

    Estupendo artículo y genial episodio.

    Me gusta

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